domingo, 3 de junio de 2012

Diferencia social

WikimediaLa diferencia social es un concepto biológico y social que hace referencia a que cada uno de los individuos que componen una sociedad es único e irrepetible: cada persona que vive en su seno es, identitariamente, irreemplazable.

La desigualdad social, por su parte, es un concepto social que se refiere a las ventajas y desventajas que un individuo, por diversas causas (sociales, económicas, etc.) posee respecto a otros. Estas ventajas y desventajas abarcan desde la vivienda (que puede ser lujosa, corriente, precaria o inexistente) la comida, la vestimenta o el nivel de educación accesible o inaccesible, entre otros factores.

Según muchos autores especializados las desigualdades sociales entre los estratos de la sociedad son cada vez más grandes, diferenciándose los ricos de los pobres. Esto es, en parte, lógico si se tienen en cuenta que a menor educación menores posibilidades de encontrar un buen empleo, lo cual desemboca en un círculo vicioso entre las malas condiciones de vida presentes y el porvenir con escazas posibilidades de mejorar.
Conjunto de personas con los mismos intereses económicos como consecuencia de relacionarse del mismo modo con los medios de producción. En la sociedad capitalista las dos más importantes son la burguesía y el proletariado.



El marxismo considera que las clases sociales aparecen en las sociedades con división social del trabajo. No todo el mundo trabaja de la misma manera, ni se relaciona del mismo modo con las fuerzas productivas. Con la aparición de la propiedad privada la sociedad se divide en dos grandes grupos o clases: la de las personas que poseen propiedad privada, que son dueñas de los medios de producción (tierras, fábricas, ...) y la de aquellas personas que no son dueñas de dichos medios y sólo disponen de la fuerza de su trabajo para sobrevivir. De este modo, son básicamente dos las clases sociales en toda sociedad que admite la propiedad privada de los medios de producción: la clase explotadora. En función de las peculiaridades del modo de producción de cada sociedad, del modo en que cada sociedad produce bienes, las clases sociales serán distintas.

características

La adscripción a determinada clase de un individuo se determina básicamente por criterios económicos, a diferencias de lo que sucede en otros tipos de estratificación social, basados en castas y estamentos, donde el criterio básico de adscripción en principio no es económico (aunque la adscripción a un determinado grupo pueda conllevar secundariamente condicionantes económicos).

Generalmente, para el conjunto de individuos que configura una clase existen unos intereses comunes, o una estrategia social maximizadora de su poder político y bienestar social. En ciertos casos, cuando un cierto número de individuos se desentiende de los intereses de su clase social se habla de alienación.
Las condiciones económicas que conllevan la adscripción a una u otra clase generalmente están determinadas por el nacimiento y herencia familiar. Así en la mayoría de las sociedades los hijos de las clases desfavorecidas a lo largo de su vida seguirán formando parte de las clases desfavorecidas, y los hijos de las clases más acomodadas tienen mayor probabilidad de ser parte durante el resto de su vida de la clase acomodada.

clase social


En un mundo globalizado, de adelantos sin precedentes en la historia, de cambios en la mentalidad del ser humano, pero también de catástrofes significativas, inevitables, las persona han seguido con la arcaica práctica de dividir a la población en distintos grupos sociales, pero ¿Cuál es la marcada diferencia, la característica, que hace la distinción entre un grupo y otro? ¿Que nos separa de pertenecer al mundo de los “privilegiados“, la de los inconformes o la de los relegados?, la respuesta es tan simple como obvia: el dinero, aquello que todo lo compra y todo lo puede, que es sinónimo de poder y prestigio, aquel que puede otorgar un título, dar respeto y crear admiración, en quien no lo posee, así como envidias y odios.
Parece increíble que un simple papel o metal se haya convertido en un personaje todopoderoso de nuestras relaciones sociales, que sin el, no valemos como individuos, pero que mentalidad tan pobre, antepone
los bienes y las riquezas al sentir humano.

LAS CLASES SOCIALES


En líneas generales, se puede decir que existen cuatro tipos de clases sociales:

 Las clases altas: clase alta-alta y clase alta
En los países industrializados constituyen entre el cinco y diez por ciento de la población. Podemos distinguir entre dos grupos:
La clase alta-alta: Estas familias poseen grandes patrimonios que, por lo general, han sido heredados más que adquiridos, es lo que se conoce como dinero viejo. Se pertenece a esta clase por origen o nacimiento. Sus hijos estudian en colegios de élite con chicos de su mismo origen social y completan sus estudios en la universidades más prestigiosas.
La clase alta: Nuevos ricos y pertenecen a ella debido a su esfuerzo. En este grupo incluimos a los que coloquialmente llamamos “peces gordos” (Ej: Florentino Pérez) y la “jet-set” (Raúl, futbolista). Sus hijos estudian en colegios y universidades privadas.

La desigualdad

Las desigualdades existen en todos los tipos de sociedades humanas. Los sociólogos hablan de la existencia de estratificación para describir las desigualdades. La estratificación puede definirse como las desigualdades estructuradas entre diferentes agrupamientos de individuos. Hablamos de desigualdades estructuradas para indicar que la desigualdad no es aleatoria, sino que sigue una pauta, tiene una base institucional, muestra cierta constancia y estabilidad a lo largo del tiempo, y es generalmente respaldada por ideas que la legitiman.
El estudio de la estratificación social consiste en el análisis de los sistemas que gobiernan el proceso distributivo y determinan quién obtiene qué, por qué, cómo y con qué consecuencias.
Los principios básicos de la estratificación son cuatro:

Opinión

una persona no se distingue tanto por lo lleno que esté su bolsillo o por el trabajo que desempeñe, aunque eso sin duda influye mucho y puede constituir algunos rasgos de su clase social, pero lo más importante a mi juicio son los valores, la cultura, la educación, la actitud ante la vida.

Una persona del hampa (delincuente), tenga el dinero que tenga, pertenece a una clase muy distinta a la de un trabajador honrado -¿quién hablaba solo de "patronos" y "obreros"?-, quien puede llegar a acumular una importante suma de dinero y estudios en él o sus hijos, ascendiendo en la escala social hacia la clase media, o incluso, si consigue hacer florecer un emporio empresarial, entrar en la alta sociedad.